sábado, 3 de enero de 2009

Mejor que analizar el 2008 prefiero hacerlo del 2009, o no, y es que simplemente estaba leyendo y me apetecía escribir.

Sin duda creo que calicicaría el 2008 como un año de cambios, ya que para nada terminó como empezó. No soy la misma María que la de hace un año, y no sé si la María del 2010 será igual. Siempre y cuando ese cambio sea a mejor no hay problema, y yo creo que lo ha sido.

Tengo una especie de "refrán" que me inventé hace poco:
2007, año de suerte.
2008, año pocho.
2009, la suerte vuelve.
Se me chafa un poco porque no empecé el año como a mí me habría gustado, ni con toda la gente como me esperaba.
Y es que la verdad duele, y verla, reconocerla y sentirla duele mucho más.
Por suerte tengo personas que me apoyan, que me calman y que se preocupan, ya sea de conocerlas hace cinco años,dos o apenas unos meses.
Aunque alguien ya no esté, no se para el mundo. Y a mí me ha costado aprenderlo.
Yo me quedo con siete años de bueno momentos y de lecciones buenas y malas. Ahora espero tener lo mismo peor con otras personas.

Quizás no todo el mundo se queda para siempre.
Quizás cada uno tenemos un ciclo determinado en la vida de los demás y, cuando lo hemos completado y aportado todo, nos vamos. Claro que este ciclo al que me refiero puede ser de siete años, sesenta, o reducirse a tan solo dos meses.

Y es que como alguien me dijo hace poquito, eso de reflexionar sobre un año tras la finalización de éste no es más que una moda. Reflexionas cuando tienes que hacerlo, ya sea Marzo o Agosto.

4 comentarios:

Laura. dijo...

Es duro pensar que alguien a quien quieres no vaya a estar ahi siempre.
Pero y por qué en vez de lamentarnos por los que no están, nos alegramos por lo que sí? Sé que es difícil pero...
A veces no queda otra.
Y hay que levantarse, siempre.
Y sé que tú lo harás, si no lo estás haciendo ya.

Y que tengo ganas de verte.

Y que sé que nos conocemos poco, pero creo que te conozco lo suficiente para decir que merece la pena conocerte más.

Séh.
Me he puesto ñoña tú :P Jajajaja.

Nos vemos en unos días.

Unknown dijo...

me gusta la última frase. No obstante, analizar el año a fin de año(valga la redundancia) abre la posibilidad conjuta de pasar página y aprender de lo bueno y la mierda del año anterior. Por otro lado, creo que a fin de año se puede hacer un balance más global. El día a día, mes a mes, o cuando sea, es más parcial.

Sí, de todos modos, hacerlo a fin de año es arbitrario y convencional.

Saludos

Laura. dijo...

ñá

Aída dijo...

Vaya... la verdad es que yo no soy capaz de hacerme a la idea de que alguien salga de mi vida...
Y también empecé el año con ese mismo sentimiento. Pero, sabes? Ahora todo se ha arreglado. Ojalá te ocurra lo mismo a ti, pero si no es así, te deseo que todo lo nuevo compense lo anterior.

Un besito ;)